CURSO CONSTELADOR

PARTE 2

LA PAREJA

CONSTELACIONES Y FAMILIA

El flujo constante de lo que sucede

Terapia Floral

EL TERAPEUTA DE PAREJA 

El terapeuta de pareja, debe ayudar a ver que la felicidad  depende de reconocer lo que es y aliarse a ello, no del flujo siempre cambiante, de lo que sucede, lo que se piensa y lo que se   siente. Hellinger habla del bajo continúo, comparando la relación de pareja con un concierto barroco, que en lo alto tiene bellísimas melodías y de fondo un bajo continuo, que lleva la música dándole fuerza y peso al decir: –te tomo como mi hombre y me doy como tu mujer; te tomo como mi mujer y me doy como tu hombre. Te tomo y me doy con amor–.

Los traspiés de la pareja más frecuentes vienen de que cada uno proviene de una familia distinta, con reglas, códigos y dinámicas propias. La mayoría de estos desequilibrios los son del intercambio y de la no aceptación de lo doloroso y de lo diferente. Ambos temen que el otro negará sus derechos, lo excluirá y en definitiva que se arrogará mayor superioridad de rango.

Esto se ve bien en casos como  la enfermedad o la minusvalía de un hijo, que separan en lo profundo a la pareja, impidiéndoles mirarlo juntos y ocasionando que estos hijos tomen la batuta, gracias a que uno de los dos o los dos se colocan con su dolor, por arriba del otro.  

constelar la pareja

Libro: “Constelar la pareja” de Diana Rosenberg en Edición Digital E-PUB

EL AMOR POR LOS OTROS

Desde el mito de lo individual, esto no se puede entender ni aceptar, porque no se acepta que el otro siempre trae pegada a su   familia.

Tampoco es posible decir, “te quiero a ti pero no quiero a tus padres”. Ni es posible “amarase a uno mismo, si uno no ama a sus propios padres”. Cuando mirás a tu pareja, ves detrás de ella, a sus padres. Yendo más lejos, sería deseable que uno sea capaz de amar a los padres de la otra persona, aunque ella misma no los ame. La dinámica de la pareja con las respectivas familias políticas del otro , son un punto central en este curso

Las relaciones se pactan y se negocian.  El lugar que tendrán los hechos, los padres y la familia del otro, se negocia. La nuestra es la época de la familia ampliada. Los míos, los tuyos, los nuestros.

INDIVIDUOS – COMUNIDAD

Modernamente la pareja pertenece a los individuos y no a la comunidad. Se puede pensar que es una idea que  ocasiona muchos trastornos, o que es una situación nueva, que obliga a los cónyuges a crear reglas y límites.  Tanto como ese foco , lo es el adiestrarse en ver el lugar de el   ex.Esto lleva un tiempo. Cuando  después de una  nueva unión, alguno sigue sintiéndose más vinculado a una unión anterior o a un hermano o a la madre que a su propia pareja, aparecen dificultades. Los hijos, que nacen, siempre   lo perciben y toman partido por uno de los padres, generalmente por el que está solo o por el más débil. Las parejas con hermanos gemelos muestran esta dinámica de manera    modélica, porque en realidad son parejas de a tres, pero si esto se acepta, las cosas pueden funcionar. Sucede porque el vínculo físico de los gemelos les impide separarse totalmente. Puede suceder, que aunque el amor esté presente, por algunas de estas implicancias, las personas sean infelices en el amor.

JERARQUÍA DE LA PAREJA

En cuanto a la jerarquía de la pareja, decir que el hombre está por encima de la mujer no es posible. Ya que si lo vemos dialécticamente sabemos que   el que parece más arriba, en el fondo se siente más abajo y al contrario. En cuanto a las relaciones anteriores, de las cuales a veces hay hijos, lo mejor es integrarlas y darles un buen lugar en los hechos y en el corazón. Nadie puede construir sobre los escombros. Tampoco en el vacío.   Es bueno despedir a las parejas que fueron, con el máximo cariño y respetar las necesidades de aquellos hijos.  Pero a veces los que nos dejaron el lugar, nos asustan. Cuando configuramos una pareja y a sus hijos, enseguida vemos las identificaciones y expiaciones que impiden el bienestar de la pareja. Con oficio, podemos ayudar a que lo oculto se haga visible en las constelaciones. En este sentido y con ese propósito, te invitamos a realizar  esta indagación,  dentro de nuestra formación.

SOBRE EL LIBRO ” CONSTELAR LA PAREJA”

PRESENTACIÓN Y REFERENCIAS

Este libro consta de dos partes, en la primera: “Un taller de constelaciones en historieta” – se volcó al dibujo un taller imaginario de constelaciones, centradas en la atención de los problemas de   pareja y sus soluciones, a través de  cuadros y viñetas.
Mientras lo guionaba, conté con el apoyo incansable de Nicolás Ivanoff que se encargó de dibujarlo. Sabina Villa, colaboró en su armado. Fueron el   trabajo y el arte de ellos, lo que me permitió plasmar este formato  en el papel. Este recurso gráfico permite  dentro del adiestramiento adentrarse perceptivamente en las dinámicas de la pareja , con mucha eficacia
 Las constelaciones, constituyen una herramienta metodológica, nacida de una propuesta de Bert Hellinger, que utiliza el acercamiento sistémico, fenomenológico y transpersonal.   Su original reciclado de  incontables fuentes, me ha permitido hallar un pródigo filón en el ejercicio de la clínica, resultado del cual fue la historieta.

Libro: “Constelar la pareja” de Diana Rosenberg en Edición Impresa (Editorial Omeba).

En la segunda parte del libro: “Un taller de constelaciones en la teoría”, el lector encontrará un análisis, acerca del modo en que trabajan las constelaciones, apoyadas en los conceptos desarrollados por Geraldine Spark coautora con   Iván Boszormenyi Nagy de su libro Lealtades Invisibles.
Según estos autores, siempre que alguien considere que los valores culturales, suprafamiliares, tales como la religión, la política, la orientación sexual, sean   traicionados, puede comenzar un matrimonio “mixto”. Y,  todos somos hijos de matrimonios mixtos. Cuando ambas partes, parecen sentirse desterradas de sus grupos de origen, en compensación, nace la   ilusión de que juntos podrían formar un nuevo grupo, sin la necesidad de reconocer las raíces .Y, en la actualidad esta es una constante.
En algunos casos, se suma a ello que los matrimonios, quieren construir una unidad, que sea   autónoma de las parejas a las que se perteneció antes. La ilusión, de que puede existir la familia “actual”, en el vacío, está muy difundida. Pero en terapia, ésto no resiste el primer análisis.
 En términos de Nicolás Abraham y Tarok, así se gestan los   traumatismos -que se refieren siempre, a asuntos de muerte y de sexo- , y  hacen nacer fantasmas, que acompañan a los pospuestos. La consecuencia más traumática es, que   los hijos anteriores  o posteriores del otro o la otra, a veces resultan temibles y esto los mantiene en la zona del secreto, en un exogrupo ó en la exclusión.
 Estas y otras  transposiciones a lo largo y ancho de las generaciones, contraponen el odio al amor. ¿Es posible considerarse sin raíces, ignorar las otras ramas u olvidar los frutos… y plantearse recomenzar de cero renegando de lo propio? La respuesta es: No. Este desorden, no permite el amor. Nadie puede comenzar de cero.
 Lyman C. Wynne, contemporáneo de los anteriores,  acuñó en 1956  el tecnicismo “constelación familiar”, para describir estas configuraciones, donde parte está a la luz y parte no. Precisiones de este autor,  acerca de asuntos prácticos del encuadre de este trabajo en la  clínica de las parejas y familias, que van  mas allá del hecho de que para su realización, asistan juntos los integrantes de la familia y la pareja o no, fueron utilizadas para desplegar la  noción de que ordenar la   familia,  sirve por igual al tratamiento de la  sordera, la depresión, la herencia,  la sexualidad o la drogadicción.
 Este libro, junto con CONSTELANDO EN CLAVE DE BACH  Y CONSTELAR EL DIVORCIO , SON  el soporte del CURSO  Y  pretende llegar a las parejas y a las personas que no pueden formar  pareja, tanto como a sus terapeutas y en general a todos los que se interesan por la clínica y la asistencia sicológica, cualquiera sea su orientación. Quiero dar las gracias a todos los nombrados y también   a todas las personas, que trabajan con constelaciones y las difunden y en particular, a las que  trabajaron conmigo, en mis clases y en mi consulta para que estos textos cobraran forma.
 Diana Rosenberg